Avanzar en la formación de capital humano y en fortalecer el trabajo público-privado serán temas clave para que la eficiencia energética siga tomando relevancia en la agenda, dice Rosa Riquelme, directora ejecutiva de la AgenciaSE.

Apoco más de un año de la promulgación de la Ley de Eficiencia Energética, el país aún tiene desafíos por abordar en este tema. Uno de los principales, dice Rosa Riquelme, directora ejecutiva de la Agencia de Sostenibilidad Energética (AgenciaSE), es concretar las oportunidades detectadas. “Eso pasa por reconocer la necesidad de ser eficientes energéticamente y que las empresas grandes, medianas y pequeñas, como también las personas, comprendan los beneficios que esto conlleva para ellos y para la sociedad”, explica.

Lo positivo, comenta, es que hoy ya se habla de eficiencia energética y las empresas están tomando conciencia de su importancia. “El mercado se está preparando, y contamos con herramientas de apoyo para que las empresas que tendrán la obligatoriedad de implementar un Sistema de Gestión de la Energía puedan hacerlo”.

-¿Cómo han visto este tema en el sector productivo?
-Desde el Ministerio de Energía y la AgenciaSE trabajamos para que las herramientas de gestión energética lleguen a todas las organizaciones y que por tanto puedan hacer un uso eficiente de la energía. Y en este ámbito, el principal desafío hoy, en el marco de la ley, es generar un mercado de servicios energéticos que apoye el proceso de implementación de Sistemas de Gestión de la Energía, la formación de capital humano especialista -que tenga presencia en todo el país, la retroalimentación de buenas prácticas y la generación de herramientas que apoyen el proceso de cumplimiento de la ley.

-¿Cuál es la importancia del trabajo público-privado en esto?
-Este es un aspecto clave, quizás el más importante de todos. Si queremos dar pasos significativos en materia de gestión de la energía y eficiencia energética y ver resultados concretos en materia de productividad y competitividad que se traduzcan en beneficios que lleguen a las personas, ambos actores deben trabajar en coordinación, entendiendo su rol y aporte en este desafío país.

-¿Cuáles son esos roles hoy?
-Por un lado, el Estado seguirá avanzando en aspectos de normativa, generación de incentivos, que impulsen la formación de capital humano y la articulación de actores involucrados, mientras que las empresas deberán asumir compromisos y entender que la eficiencia energética no solo les da mayor competitividad y productividad, sino que también ayuda al desarrollo del país.

Finalmente, la generación de mesas de trabajo y de instancias de encuentro y de comunicación entre ambos estamentos es necesaria para articular un país que avanza hacia el desarrollo de la mano de una mejor y más eficiente gestión de la energía.

Fuente: Diario Financiero

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